Casa Imperial, uno de los restaurantes más emblemáticos de la Ciudad de México, presenta un nuevo menú de degustación que celebra la riqueza de la cocina mexicana con un toque contemporáneo. Ubicado en Polanco, el espacio se ha consolidado como un referente de alta gastronomía nacional, donde cada platillo narra una historia de tradición, ingredientes autóctonos y técnica refinada.

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Menú de degustación en Casa Imperial, Polanco
Con esta propuesta, los comensales podrán recorrer México a través de siete tiempos que combinan texturas, aromas y sabores únicos, todos inspirados en distintas regiones del país.
Del campo y la tierra: un homenaje al origen
El recorrido comienza con un sope de escamoles a la hidalguense, una preparación que destaca por su delicadeza y por el respeto hacia uno de los ingredientes más preciados de la cocina mexicana. Le sigue un clásico guacamole con chapulines, que aporta un contraste entre lo crocante y lo cremoso, exaltando el sabor ancestral de los insectos comestibles.
Para continuar, llega la sopa de lima con pollo deshebrado, pimientos y juliana de tortilla, una receta tradicional del sureste que reconforta el alma y equilibra acidez, frescura y textura.
Sabores del mar y de la parrilla
El siguiente tiempo es una joya de la cocina costera: camarón zarandeado al carbón, marinado con chiles pasilla, guajillo y chipotle, acompañado de sal de gusano y limón amarillo asado. Este platillo ofrece un balance perfecto entre picor, ahumado y acidez.

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Posteriormente, el dúo de tacos taurino y de birria de la casa evoca la pasión mexicana por los sabores intensos. El primero sorprende con su relleno de filete y toque especiado, mientras que el segundo conquista con su caldo profundo y carne suave, ideal para acompañar con una copa de vino tinto o una margarita clásica.

El toque final: carne y postres con carácter
El menú culmina con un filete mignon a la pimienta, acompañado de papas a la francesa, un guiño a la cocina internacional que se integra de forma armoniosa a la propuesta mexicana del lugar. Para el cierre dulce, la degustación incluye dos postres que son pura nostalgia: pastel de tres leches y pastel de elote con rompope, ambos con la textura y el sabor casero que distinguen a Casa Imperial.

Una experiencia para repetir
Además del menú de degustación, todos los platillos están disponibles en la carta regular, lo que permite a los visitantes disfrutar sus favoritos en cada visita. Casa Imperial reafirma así su compromiso con la excelencia y la autenticidad, manteniendo viva la esencia de la cocina mexicana en cada detalle, desde la selección de ingredientes hasta la presentación en mesa.
Costo: 1, 200 pesos mexicanos sin maridaje.
Dirección: Emilio Castelar y Galileo, Polanco IV Secc, Miguel Hidalgo, 11560 Ciudad de México, CDMX.
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Directora editorial digital. Escribo sobre gastronomía, estilo de vida y bienestar.
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